Al ser preguntado a qué se refería exactamente, Bono declaró con evidente frustración: "vamos a ver, si no lo sabe usted, ¿qué le hace pensar a usted que tenga que ser el presidente del Congreso de los Diputados quien se lo diga?".
El barón socialista aprovechó la presencia de los medios para acusarlos "de fomentar la confusión y el disenso entre aquellos que, en su pleno derecho, emiten opiniones más o menos respetables, y el ex ministro de defensa, un humilde servidor público cuya misión es, en la medida en que le es posible, arbitrar de manera imparcial entre los partidos políticos con representación parlamentaria, ciñéndose siempre al Plan de Declaraciones".
A la voz de '¡José, danos un titular!', Bono respondió con ira contenida: "les ruego que no removamos el fango, que está muy bien allí donde está; respecto a aquello, no pienso decir nada más de lo ya dicho, que es lo siguiente: 'lo que es contradecirme, no me he contradicho', y desde luego no se crean ustedes que me van a arrinconar, ya que soy, lo que podríamos llamar, y bien llamado, un perro viejo en estas lides, y ya saben lo que dice el refranero, que no es precisamente lo que dicen que dije, ni mucho menos".