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13 de junio de 2011

La comunidad internacional en alerta por el brote de violencia en un país indeterminado

Agencias - Redacción

EL CONFLICTO ENTRE PARTIDARIOS y opositores del gobierno de un país indeterminado se cobró ayer decenas de muertos en la capital que tenga. La policía de la calurosa nación atacó a una multitud congregada ante la residencia del hombre fuerte para exigir su dimisión que fue dispersada con balas de goma, gases lacrimógenos y fuego real.

Según la Agencia F, una facción del Ejército se ha sumado a la revolución y ya se han registrado los primeros combates entre fuerzas leales, por un lado, y los opositores al régimen, por otro, con un número de muertos elevado y reducido respectivamente de tropas opositoras y gubernamentales, según fuentes oficiales, y viceversa, según los alzados.

“Lo más seguro es que la nación de la que hablamos tenga una historia muy compleja y por lo tanto debemos actuar con mucha cautela para no soliviantar su frágil urdimbre sociopolítica”, dijo la ministra de Asuntos Exteriores Trinidad Jiménez de la crítica situación allí. “El Gobierno de España espera que se vuelva al diálogo en ese lugar lo antes posible”.

El portavoz de la Casa Blanca James Carney envió una advertencia al líder del territorio en cuestión al asegurar que “la expectativa de Estados Unidos es que menganito respete el derecho de los ciudadanos a manifestarse pacíficamente”.

El Consejo Europeo, la OTAN, la ONU, la CECA, Mercosur, la Liga Árabe, la Unión Africana y la CSCE han convocado sendas reuniones de urgencia para tocarse los huevos respecto a la crisis en el Estado de población predominantemente pobre y de tez oscura, que seguramente no es un archipiélago aunque no se descarta esa posibilidad.